En la mañana de ayer, nuestros niños bielorrusos de plan de acogida volvieron a su país.
Un año más se despidieron, con la ilusión de ver a sus familias, pero con un trocito de su corazón dejado en las familias que durante más de cuarenta días han estado cuidando de ellos.
Deseando que el próximo año volvamos a repetir esta magnifica experiencia, desde la Hermandad agradecemos tanto a los padres de acogida, a NHD Joaquín Francisco Domínguez Escobar (Hospital San Agustín), como a los monitores que colaboran en las actividades, su colaboración para llevar a buen fin este gran proyecto social.
Un año más se despidieron, con la ilusión de ver a sus familias, pero con un trocito de su corazón dejado en las familias que durante más de cuarenta días han estado cuidando de ellos.
Deseando que el próximo año volvamos a repetir esta magnifica experiencia, desde la Hermandad agradecemos tanto a los padres de acogida, a NHD Joaquín Francisco Domínguez Escobar (Hospital San Agustín), como a los monitores que colaboran en las actividades, su colaboración para llevar a buen fin este gran proyecto social.